NYT, los amigos progres de McCain

por Alberto Acereda, 29 de febrero de 2008

(Publicado en Diario de América, 22 de febrero de 2008)
 
Los progres del diario The New York Times (NYT), o sea los mismos que hace unos días, apoyaron cual fariseos a John McCain para quitarse de en medio a Mitt Romney en las primarias republicanas, acaban de publicar ahora un artículo trapero contra el senador de Arizona. Cuentan los hachas del diario neoyorquino que John McCain y una cabildera-lobbyist llamada Vicki Iseman, treinta años más joven que el veterano senador, tontearon con manos y sin ellas hace unos años. Y como -según explican los del otrora prestigioso NYT- el senador se cegó con la muchacha, acabo cediendo a favores y metió la pata... Esto lo cuentan, quede claro, los amiguetes progres de McCain en el NYT, con un artículo que, con escasas razones y sin ninguna prueba clara, emparenta todo esto con el ya viejo escándalo del 'Keating Five' que años atrás tuvo también a McCain como protagonista.
 
En suma, que los del NYT ya están a la gresca contra McCain, en acto claro de 'insulta que algo queda', o sea 'tira la piedra y esconde la mano'. A día de hoy, lo que quieren vender desde el diario neoyorquino no es más que humo, sin fundamentación, sin pruebas y sin datos. Quizá mañana los tengan, pero lo contado hasta ahora es pura basura informativa. Aun así, la realidad es que tanto la opinión pública como los medios de comunicación norteamericanos han pasado a hablar del supuesto escándalo de McCain en lugar de tratar, como hacían hasta hace unas horas, de las fallidas declaraciones de Michelle Obama, de la vacuidad de Barack Obama o de la flojera electoral de Hillary Clinton. Los del NYT han logrado, pues, su objetivo.
 
Lo más grave, además, es que McCain es a día de hoy el casi seguro candidato republicano gracias a esos mismos medios de comunicación progres como el NYT con los que tanta amistad y tantas sonrisas ha tenido el propio McCain. Pero ahora, usado y manejado, al testarudo senador le dan la patada porque de lo que se trata en estos momentos es de destruirlo, acabar con él tras haber hecho ya lo mismo con Mitt Romney o con Mike Huckabee, y de igual manera con todos esos conservadores que tanto odian los de la caverna mediática del NYT y su afiliada comparsa.
 
Porque reconozcamos que McCain ha tenido una larga luna de miel con esos medios de la progresía norteamericana como ese indigente periódico de la desinformación que es el NYT, el mismo que publicaba hace unos meses un ataque vía MoveOn.Org contra el general David Petraeus. McCain juzgó erróneamente que esos buenos progres iban a entender su mensaje y hasta votar por su presidencia. En ese juego, los conservadores -que siempre han dudado y siguen dudando de McCain- fueron presentados por McCain y la progresía como la derecha radical y crispadora. Y McCain cayó en la trampa. En las últimas horas, han sido precisamente esos conservadores los primeros en salir a defender a McCain. Lo han hecho con razón y con justicia. Porque el tiro por la espalda desde el NYT contra el veterano McCain parece tomado del libreto prisaico y no de la necesaria honradez informativa.
 
Está todavía por saber si este episodio del hampa del NYT le enseñará una lección a McCain y si nuestro senador aprenderá de una vez por todas que su base y su apoyo para ganar la presidencia no está entre la progresía elitista neoyorquina disfrazada de moderada, centrista o independiente. Su apoyo está en la derecha conservadora, sí... esa que hasta un heredero de Ortega ahora recrimina en España, pero la misma derecha conservadora que gana elección tras elección siempre que se defienden de verdad y siempre que se llevan adelante sus principios, sin complejos ni medias tintas. ¿Aprenderá McCain para lo que queda de campaña? ¿O habrá más cosas que ver, querido Senador?

 
 
Alberto Acereda es catedrático universitario, escritor y analista político, especialista en temas culturales transatlánticos y Miembro de la Academia Norteamericana de la Lengua.