¿Curar o usar la pobreza?

por Thomas Sowell, 18 de enero de 2006

“China está sacando de la pobreza a un millón de personas cada mes”.
 
Es sólo una afirmación hecha en un interesante libro nuevo titulado: “The Undercover Economist” (El economista secreto) por Tim Harford. Pero tiene enormes implicaciones.
 
No he verificado las estadísticas pero suena razonable. Si es así, vale la pena que todos presten atención.
 
La gente en la izquierda política habla mucho sobre la pobreza y aboga por todo tipo de programas y políticas para reducirla pero increíblemente muestran poco interés a la hora de ver cómo se ha reducido verdaderamente la pobreza, sea en China o en cualquier otra parte.
 
Puede jugarse el sueldo de que la izquierda mostrará poco o ningún interés en la forma cómo los chinos están saliendo de la pobreza por millones cada año. La izquierda ha mostrado mucho más interés en China allá por los tiempos cuando Mao la gobernaba con el estilo de la izquierda extrema y cuando millones de chinos se morían de hambre.
 
Aquellos de nosotros que no pertenecemos a la izquierda deberíamos echarle un vistazo más de cerca a los chinos de la actualidad que están saliendo de la pobreza.
 
Primero que nada, ¿que significa siquiera decir que “China está sacando de la pobreza a un millón de personas cada mes”? ¿De dónde ha sacado el gobierno chino el dinero para lograr eso?
 
La única gente a la que el gobierno chino le puede cobrar impuestos es a la gente en China. Un país no puede levantarse de esa manera valiéndose solamente de su propio esfuerzo. Ni tampoco ha habido nunca suficiente ayuda exterior para sacar de la pobreza a un millón de personas por mes.
 
Si no ha sido el gobierno chino, entonces ¿quién ha sido? El pueblo chino. Ellos no han salido de la pobreza por recibir la magnificencia de nadie.
 
Lo único que puede curar la pobreza es la riqueza. Los chinos adquieron su riqueza a la antigua usanza: La crearon.
 
Después de la muerte de Mao, los controles gubernamentales sobre el mercado empezaron a relajarse, primero de forma tentativa, en lugares seleccionados y para industrias seleccionadas. Luego, como esos lugares y esas industrias empezaron a prosperar dramáticamente, decidieron aplicar la fórmula en otras áreas con resultados similares.
 
Hasta a los extranjeros se les concedió permiso para entrar, invertir en China y vender sus productos en China. Pero esto no era simplemente una transferencia de riqueza.
 
Los extranjeros no fueron para ayudar a los chinos, sino para ayudarse a sí mismos. La única manera en la que extranjeros y chinos podían sacar beneficio era si se creaba más riqueza total. Esto es lo que ha sucedido pero la izquierda política prácticamente no tiene interés alguno en la creación de riqueza, sea en China o en cualquier otro lado, muy a pesar de su cacareada preocupación por “los pobres”.
 
Ya que la riqueza es lo único que cura la pobreza, Ud. podría pensar que la izquierda debería estar tan obsesionada con la creación de riqueza como lo están con la redistribución de la riqueza. Sin embargo, Ud. se estaría equivocando.
 
Cuando se trata de sacar a la gente de la pobreza, la redistribución de ingresos y riqueza tiene unos antecedentes mucho más malos e irregulares que la creación de riqueza. En algunos lugares, como Zimbawbe hoy en día, los intentos de redistribuir la riqueza han resultado ser una redistribución de pobreza.
 
Mientras que la creación de riqueza puede ser más efectiva porque posibilita que millones de personas salgan de la pobreza, no representa nada especial para la izquierda política, no tiene importancia pomposa, ni superioridad moral, ni poder para que ellos puedan esgrimirlo sobre otros. Claramente, la redistribución es lo mejor para la izquierda.
 
El énfasis izquierdista acerca de “los pobres” funciona como si los pobres fueran un grupo separado. Pero, por lo menos, en la mayoría de países occidentales, millones de personas que son “pobres” en una época de su vida, son “ricos” en otra época - tal y como estos términos se definen convencionalmente en la actualidad.
 
¿Y eso cómo puede ser? La gente tiende a ser más productiva - crear más riqueza - con el paso del tiempo, adquiriendo más experiencia, acopiando destreza y formación.
 
Eso se refleja en los ingresos que son dos o tres veces mayores en años posteriores que al principio de la carrera. Pero eso también es de poca o ninguna importancia para la izquierda política.
 
Las cosas que funcionan para millones de personas brindan poco a la izquierda; ultimadamente la izquierda es acerca de la izquierda y no acerca de la gente que ellos afirman querer sacar de la pobreza.

 
 
Thomas Sowell  es escritor prolífico de una variedad de temas desde economía clásica a derechos civiles, autor de una docena de libros y cientos de artículos, la mayor parte de sus escritos son considerados pioneros entre los académicos.  Ganador del prestigioso premio Francis Boyer presentado por el American Enterprise Institute, actualmente es especialista decano del Instituto Hoover y de la Fundación Rose and Milton Friedman
 
 
©2005 Creators Syndicate, Inc.
©2005 Traducido por Miryam Lindberg
 
 
GEES agradece al Dr. Thomas Sowell el permiso para publicar este artículo.