Más ausencias que presencias

por GEES, 21 de octubre de 2013

 El año pasado, con motivo de la XXII Cumbre Iberoamericana, nuestro balance se resumió en el titular: "Que las cierren". La realizada este fin de semana confirma nuestra opinión. A la convocada en Panamá faltó la mitad de los jefes de Estado: 11 de 22. Y no sólo los eslabones del ALBA (Venezuela, Cuba, Bolivia, Nicaragua, Ecuador…) y otros izquierdistas (Uruguay), sino otros vinculados al respeto a la democracia y al liberalismo económico, como Chile, Perú y Guatemala, más Brasil, la mayor economía de Sudamérica. También faltó Cristina Fernández de Kirchner, convaleciente de una operación y en vísperas de una derrota electoral que agravará su estado de salud.

La importancia de la XXIII Cumbre se reflejó en los medios de comunicación españoles con análisis sobre el porte del príncipe Felipe y lo bien que había pronunciado su discurso. Lo mismo que ocurrió en el desfile del 12 de octubre, en que los opinadores estaban más pendientes de los gestos del príncipe y su consorte que de las unidades militares.
Mariano Rajoy repitió el comportamiento de la cumbre de 2012: agradecimiento a los países americanos por recibir a ciudadanos españoles (muchos de ellos con la doble nacionalidad, ya que son de origen americano o hijos de éstos) y venta de España como destino de inversiones. Debido al complejo del español ante el extranjero, Rajoy no fue capaz de mencionar siquiera que los iberoamericanos en España cuentan con más derechos sociales que los españoles en Iberoamérica, empezando por la asistencia sanitaria gratuita (ahora en principio restringida a quienes se encuentren en situación legal). Por otro lado, los únicos países que disponen de empresas capaces de invertir en España son México, Brasil y Chile, por lo que pedir dinero a los paraguayos o los colombianos es como pedírselo al ciudadano que todavía está pagando su hipoteca.
Iberoamérica, al igual que la Unión Europea, se está dividiendo internamente. La crisis económica hace que cada Gobierno piense sólo en su interés (cosa lógica en las relaciones internacionales) y postergue proyectos de cooperación e integración en beneficio de la búsqueda de mercados y capitales cada vez más escasos. Pero en América hay otro factor de división, que es el imperialismo bolivariano, poco respetuoso de las soberanías que no se someten a los planes de Caracas y La Habana.
La Alianza del Pacífico, que es el subgrupo regional de mayor interés para España, tampoco estuvo al completo, ya que si bien asistieron los presidente de Colombia (éste, amigo personal de Rajoy) y México, faltaron los de Chile y Perú.
Como en 2014 el encargado de organizar la XXIV Cumbre es México, quizás Enrique Peña Nieto tenga más éxito en persuadir a más gobernantes americanos para que acudan a ella del que ha tenido el panameño Ricardo Martinelli.