Revolución autonómica en España: a contracorriente de Europa

por Carlos Ruiz Miguel, 29 de junio de 2006

(Publicado en El Semanal Digital, 28 de junio de 2006)

La historia suele gustar de las ironías. Por una ironía de la historia se han producido casi simultáneamente tres hechos que nos permiten constatar la magnitud del error de la política autonómica del presidente Rodríguez.

Esos tres hechos son: la aprobación en un referéndum (convocado ilegalmente, por cierto) del nuevo Estatuto de Cataluña; la aprobación por la 'gran coalición' gobernante en Alemania (democristianos y socialistas) del recorte del federalismo en la mayor reforma constitucional operada en Alemania desde 1949; y el rechazo en Italia, en referéndum nacional, de la reforma constitucional federalizante. La prensa ha prestado más atención al referéndum italiano, pero quizá porque pocos periodistas conocen alemán, apenas se ha hecho eco de la revolucionaria reforma sobre la que los dos grandes partidos alemanes han dado su acuerdo de principio.

El presidente Rodríguez prometió que iba a llevar a España al 'corazón de Europa'. Aquel corazón, al parecer compuesto por Chirac y Schröder, infartó. Schröder perdió las elecciones y Chirac es un presidente decadente al que le espera la cárcel al final de su mandato. En esa indocumentada apuesta por 'Europa', el presidente Rodríguez se empeñó en apoyar una supuesta 'Constitución' europea (Rodríguez hablaba de una 'Europa constitucional') sobre la que hay acuerdo que no podrá resucitar llamándose 'Constitución' (pues no lo es, como expliqué en su momento, y ahora se reconoce), sino a la que se baraja llamar 'ley fundamental'.

Con la aprobación del nuevo Estatuto catalán impulsado por Rodríguez, nuestro alejamiento de Europa se acentúa. Alemania, el Estado federal más perfecto de Europa, aquel que querían imitar los juristas cercanos al PSC, consigna el fracaso del modelo que aquí se quería imitar y pretende modificar la Constitución para reforzar las competencias del Estado federal (por ejemplo, en materia de policía y lucha contra el terrorismo). Al revés de lo que se hace en la España de Rodríguez, donde la locura de las policías autonómicas se pretende extender a nuevas regiones. Por su parte, en Italia, el cambio de la estructura del Estado se ha sometido a referéndum de toda la Nación (como en España pedía el PP), sin que ese cambio fuera llevado a cabo unilateralmente por una o varias regiones del Norte. Y el resultado es que la Nación, pronunciada en su conjunto, ha dicho 'no' a federalizar el país.

Mientras tanto, en España, la ignorancia de las elites (no sólo del PSOE y de los nacionalistas, ¡también del PP!), acentuada en el caso del PP por los complejos de ciertos líderes (sobre todo regionales), hace el resto. Más lejos que nunca de la Europa desarrollada, en algunas regiones se pretende imitar el suicida Estatuto catalán. El modelo ya no es Alemania. Es Montenegro. ¡Qué locura!


Carlos Ruiz Miguel es Analista del GEES en el área de Magreb y en temas de Derecho Constitucional