Michael Moore de visita en hospitales de Cuba

Cuba tiene un sistema médico muy socializado -- mucho mejor que el sistema médico a medio socializar que tiene Estados Unidos, según Michael Moore y su documental “Sicko”.

“Creen en la medicina preventiva', dice Moore en su película. 'Y parece como si hubiera un médico en cada manzana”.

 

Para probar su argumento, Moore se llevó a unos cuantos empleados de urgencias enfermos del 11 de Septiembre a Cuba. El grupo, con un equipo de cámara en ristre, fue tratado en un hospital de exhibición de La Habana.

 

'Les pedí que nos dieran exactamente la misma atención que prestan a sus conciudadanos cubanos. Nada más y nada menos. Y eso es lo que hicieron', insiste Moore en la película.

 

Le pregunté si se cree eso realmente.

 

“Oh, sé que es lo que hicieron”, me informó. 'Una de las empleadas de urgencias del 11 de Septiembre se escapó de su habitación hospitalaria, bajó las escaleras y simuló estar enferma. Dijo que tuvo lugar exactamente el mismo proceso”.

 

Sugerí que eso se debía a que las autoridades cubanas envían a turistas y dignatarios a clínicas especiales.

 

“No nos enviaron allí. Fuimos a un buen número de hospitales' dijo.

 

¿Es un hospital corriente?

 

“Sí, tienen una clínica en cada vecindario en Cuba. Esto no lo digo yo solamente, ya sabes. Todas las organizaciones mundiales de la salud han confirmado que si hay una cosa que hacen bien en Cuba, es la atención médica. Hay muy poco debate sobre eso”.

 

Oh, hay mucho debate.

 

El doctor José Carro, natural de Cuba, que entrevista a los médicos cubanos que se han trasladado a Estados Unidos, dice que la película de Moore miente. El doctor Darsi Ferrer, defensor de los derechos humanos en Cuba, nos decía que los americanos no deben creerse las afirmaciones que se hacen. Describe al pueblo cubano como 'loco de desesperación' a causa de la pobre calidad de la atención.

 

George Utset, que escribe en la página web The Real Cuba [www.therealcuba.com/], afirma que Moore y su grupo fueron trasladados a las plantas superiores del hospital, a las salas reservadas a los privilegiados. 'No van al hospital de los cubanos corrientes. Van al hospital de la élite. Y es una condición muy diferente' dice Utset.

 

Para los cubanos corrientes, la atención médica es diferente. Un video de YouTube.com [http://tinyurl.com/3c4pzg], subido por una mujer de Venezuela, intenta mostrar las dos formas de atención médica, una para los privilegiados que pagan en dólares y una muy inferior para los cubanos corrientes.

 

Moore afirma que los cubanos viven más que los americanos. Es cierto que un informe de la ONU afirma eso. Pero Naciones Unidas no recoge ningún dato. 'Naciones Unidas informa simplemente de lo que quiera que el gobierno de Cuba informe, de modo que carecemos de cualquier dato objetivo para saber cuáles son las estadísticas reales', dice Carro.

 

Exactamente. Los países comunistas son famosos por ocultar la verdad. Hace 20 años, cuando informaba desde la Unión Soviética, los funcionarios insistían en que no había pobres en Rusia, pero rechazaban permitirme buscar por mi cuenta.

 

¿Por qué deberíamos creer las estadísticas sanitarias del gobierno de Cuba?

Cuba afirma tener baja mortalidad infantil, pero los médicos nos cuentan que los obstetras cubanos provocan el aborto del feto en cuanto piensan que pudiera haber un problema. El Dr. Julio Alonso nos cuenta que solía realizar entre 70 y 80 abortos al día. Y he aquí un modo aún más fraudulento de viciar las cifras de mortalidad infantil: algunos médicos nos cuentan que si muere un bebé a las pocas horas del parto, los médicos cubanos no lo contabilizan como vivo en algún momento.

           

Moore me informaba: 'Todas las organizaciones de salud independientes del mundo, y hasta nuestra propia CIA, están seguras de que los cubanos tienen un sistema sanitario bastante bueno. Y en la práctica viven más que nosotros”.

           

Pero la CIA no afirma que los cubanos vivan más que los americanos. En la práctica, la CIA afirma que los americanos viven más tiempo.

           

Cuando presioné a Moore, se retractó de las afirmaciones que realiza su película acerca de Cuba. 'Copiemos a Canadá y Gran Bretaña', decía, 'porque creo que hay argumentos legítimos a hacer contra la película y contra la supuesta idea de la medicina socializada. Y creo que deberías cuestionarme sobre estas cosas, y te daré mi respuesta”.

           

La semana que viene en esta columna y este viernes en “20/20”, le acepto ese desafío.