La ONU concede un aumento a Hamas

por Rachel Ehrenfeld, 12 de enero de 2006

La decisión de proporcionar un enorme incremento salarial a sus miles de empleados por parte de la United Nations Relief and Works Agency for Palestine Refugees in the Near East (UNRWA) a principios de diciembre del 2005 contribuye directamente a las arcas de Hamas. El significativo incremento entra en vigor este mes.
 
El incremento de entre el 7,5 y el 21% para los empleados de la UNRWA fue implementado ostensiblemente para acercar sus salarios al nivel muy superior de los empleados de la Autoridad Palestina. La UNRWA es 'el 2º mayor contratista' en Gaza después de la Autoridad Palestina.
 
El aumento de la UNRWA también ha tenido el efecto directo de incrementar la financiación de la ONU a Hamas. La mayor parte de los empleados de la UNRWA en Gaza - el 90% de hecho - votó a Hamas en sus elecciones del 2003. Hamas también domina el comité ejecutivo, y controla 23 de los 27 puestos de representante de los trabajadores en los distintos sectores, como profesorado, secretariado, servicios, etc...
 
Puesto que Hamas deduce las tasas de pertenencia de sus activistas de los salarios de la UNRWA, el incremento salarial de la UNWRA contribuye directamente al presupuesto de Hamas.
 
Cuanto más gane Hamas, más tiene que perder Fatah. En la práctica, un líder de Fatah en Gaza y candidato a las elecciones en el campamento de refugiados de Khan Yunis, el doctor Sallah Bardawil, denunciaba firmemente el incremento salarial de la UNRWA. El 29 de diciembre del 2005, Bardawil observaba que la campaña electoral de Hamas está financiada directamente por las tasas abonadas a Hamas por los miembros de la UNRWA. Según Bardawil, Hamas financia también sus actividades con contribuciones adicionales procedentes del público palestino y del mundo musulmán.
 
No obstante, puesto que Hamas, al igual que su organización matriz, la Hermandad Musulmana, obliga a cada miembro a abonar cantidades proporcionales del 3 al 5% de sus salarios, el incremento eleva tanto el zakat - el pago obligatorio de al menos el 2,5% de sus ingresos anuales - como las tasas de pertenencia. Por lo tanto, las contribuciones de los trabajadores de la UNRWA añaden más fondos al presupuesto de campaña de Hamas.
 
Israel exigió hace tiempo y repetidamente que la UNWRA despidiese a los empleados que son miembros de la organización terrorista de Hamas. Muchos de los terroristas y de los suicidas o son empleados de la UNRWA, o proceden de campamentos e instituciones educativas de la UNRWA. La UNWRA niega las acusaciones a pesar de las pruebas.
 
La UNRWA lleva trabajando por preservar y continuar el problema palestino de los refugiados desde su establecimiento en 1949, junto con las naciones árabes islamistas y con la Autoridad Palestina desde 1993, en lugar de solventarlo. Por lo tanto, la UNRWA mantiene en marcha el conflicto árabe israelí. En el ejemplo revelador más reciente, después incluso de la retirada israelí de Gaza, cuando la Autoridad Palestina rehusó ayudar a los refugiados de los 'campamentos' a pesar de recibir la generosa ayuda internacional para el desarrollo económico, la UNRWA no exigió que la AP asentara a sus refugiados. Por ejemplo, la AP recibió 100 millones de dólares de los Emiratos Árabes Unidos (UAE) para construir una nueva ciudad llamada Sheikh Khalifa City, en honor al presidente de los UAE, sobre las ruinas de Morag, uno de los asentamientos israelíes. Esta nueva ciudad iba a albergar a las familias de los shahids (mártires), de prisioneros, y las familias de perjudicados por el conflicto.
 
Pero aún así, a pesar de las pobres condiciones de vivienda de los campos de refugiados, la Autoridad Palestina rehúsa albergar a estos refugiados en la nueva ciudad. La AP mantiene esta posición con el fin de mantener el problema de los refugiados y reclamar 'el derecho de retorno palestino' a Israel. La UNRWA lleva el juego a Hamas. Además, proporciona apoyo financiero a Hamas, que está dedicado a la perenne jihad contra Israel y Occidente.

 

 
La Dr. Rachel Ehrenfeld es la principal autoridad mundial en narcoterrorismo y la principal consultora internacional en materia de terrorismo internacional, corrupción política, lavado de dinero, tráfico de drogas y crimen organizado. Su texto Funding Evil; How Terrorism is Financed and How to Stop It es el único libro que existe en la materia. Actualmente es directora del American Center for Democracy tras haber dado clases en la Facultad de Derecho de Nueva York, el Columbia University Institute of War and Peace Studies y la Johns Hopkins. Sus artículos y comentarios han aparecido, entre otros sitios, en The Wall Street Journal, National Review, The EUobserver, The Jerusalem Post, The NY SUN, The O'Reilly Factor, Fox News, CNN, NBC News o MSNBC.
 
Alyssa A. Lappen es periodista miembro permanente del Center for American Democracy; entre sus numerosas colaboraciones es conocida particularmente por su labor como editor asociado para la revista Forbes.