La amistad USA tiene un precio: España vuelve a Irak

por Carlos Ruiz Miguel, 22 de junio de 2006

(Publicado en El Semanal Digital, 21 de junio de 2006)
 
 
La 'mentira originaria' del Gobierno Rodríguez pasa factura. Esa mentira para consumo interno provocó un desperfecto externo. Pero daba igual. En el extranjero no votan.

Es conocido que Rodríguez ganó las elecciones prometiendo una retirada condicional de Irak. Es igualmente conocido que Rodríguez retiró las tropas españolas de Irak incumpliendo su promesa: no esperó a ver si el '30 de junio' de 2004 iba a haber una resolución del Consejo de Seguridad avalando (según él) esa presencia. En efecto, el Gobierno, después de haber retirado las tropas (sin cumplir el plazo que él mismo estableció) votó a favor de la resolución 1546 (8 de junio de 2004) que 'pide a los Estados Miembros y a las organizaciones internacionales y regionales que presten asistencia a la fuerza multinacional, en particular con fuerzas militares, según se convenga con el Gobierno del Irak, para ayudar a satisfacer las necesidades del pueblo iraquí en materia de seguridad y estabilidad'. Para colmo, en Túnez el 9 de septiembre de 2004 hizo un llamamiento a que todos los demás países siguieran su 'ejemplo'.

¿Por qué Rodríguez retiró las tropas incumpliendo las condiciones que él mismo había fijado a su promesa? Difícil saberlo. Pudiera pensarse que con esta medida intentaba dar credibilidad a la teoría que ligaba el 11-M con Irak. El gobierno promovía así la ficción de que el 11-M fue culpa de nuestra política en Irak. Para ello se promovió una retirada que deliberadamente se dejó que fuera interpretada como una 'rendición' ante los que el Gobierno quería que fueran considerados autores del atentado. Sin embargo, el auto del juez del caso 11-M descarta cualquier autoría intelectual de Al Qaeda.

La ficción promovida por el Gobierno tuvo buenos réditos en el electorado interno... pero tuvo un coste inesperado en el exterior, donde fue vista como el Gobierno español pretendía que fuera vista: una rendición ante el terrorismo islámico. El resultado es que después de la retirada española el terrorismo en Irak se recrudeció. Y esa maniobra de Rodríguez para consumo interno causó la pérdida de muchas vidas en el Ejército norteamericano.

Para intentar arreglar el estropicio, el gobierno de Rodríguez ofreció a USA una colaboración inconfesable: nunca como con Rodríguez aterrizaron en España tantos 'vuelos de la CIA' transportando a detenidos para ser torturados en ciertos países. Ahora, para que Rice visite España USA exige que la ayuda también sea pública: el gobierno español debe comprometerse a colaborar con el nuevo gobierno iraquí. Esto implica reconocer la legitimidad de este gobierno surgido de la guerra. Dicho de otra manera: indirectamente, Rodríguez reconoce que la guerra de Irak era legal. Tantas maniobras para volver al punto de partida. Dos años perdidos.

 
 
Carlos Ruiz Miguel  es Analista del GEES en el área de Magreb y en temas de Derecho Constitucional