Islamismo. La ceguera voluntaria

por Óscar Elía Mañú, 1 de diciembre de 2011

Publicado en La Gaceta el 29 de noviembre 2011

La ceguera voluntaria es un famoso libro escrito en 1985 por Christian Jelen, con prólogo de Jean-François Revel, que causó escándalo e ira en la izquierda francesa. En la obra, Jelen relata cómo desde 1917 la Revolución rusa y su carácter despótico y tiránico eran bien conocidos en Europa occidental: los que se engañaron acerca de la naturaleza de un régimen que duraría más de 70 décadas, no lo hicieron por falta de información, sino de voluntad.

Casi tres décadas después, la información llega de Tahrir o de Bengazhi en tiempo real, pero la misma ceguera se repite en parte de los occidentales. La revuelta de jóvenes liberales y socialistas en Egipto ha sido tragada por los Hermanos Musulmanes, que ni creen en una democracia liberal que desprecian ni en un orden internacional que siempre han combatido; el triunfo relativo de EnNahda en Túnez es garantía de que ni las libertades religiosa, económica o de la mujer avanzarán un solo palmo; y los equilibrios dentro del Consejo de Transición Libio muestran que aquí es directamente el yihadismo el aspirante a hacerse con una porción del poder en la era posgadafista.

Que todos sigan el modelo turco –el islamismo por etapas puesto en marcha por Erdogan para desguazar la Turquía moderna– lo hace más peligroso. La transición pretendidamente pacífica, o la utilización de personajes débiles y sin escrúpulos como Al Baradei o Gannouchi, es una necesidad táctica que cumple su cometido: no despertar la suspicacia europea ni el justificado temor ante el avance de la hermandad musulmana al otro lado del Mediterráneo. Pero es en Europa donde está el verdadero problema, porque –saltando al clarificador libro de Bruce Bawer– Egipto, Túnez o Libia se alejan de las libertades “mientras Europa duerme” o se engaña a sí misma.